El cine permite ahora oler y sentir las películas
Una cadena internacional inauguró en Lima una sala con tecnología 4DX, la segunda de Sudamérica en este tipo. Permite al espectador ser parte de la trama.
Si pensabas que la tercera dimensión (3D)
y las proyecciones digitales eran lo máximo en tecnología que podía
brindar una sala de cine, te equivocas. Desde hace unas semanas, el Perú
es el segundo país en Sudamérica -después de Brasil- en donde las
películas se pueden disfrutar de una manera distinta gracias a la
inauguración de una sala de cine 4DX.
Con esta tecnología, el espectador no solo podrá ver en tres
dimensiones lo que ocurre en la película, sino que podrá sentir lo que
sucede gracias a efectos de viento y movimiento, así como por olores y
hasta salpicaduras de agua.
“La sala cuenta con dos proyectores digitales de alta definición,
con lo cual el 3D se ve fantástico. Además, tiene 240 butacas que se
mueven de arriba a abajo, de izquierda a derecha, y de adelante hacia
atrás. Luego, podrán percibir una gran cantidad de aromas. También en la
sala se simulan los efectos de rayos, viento, humo y hasta
salpicaduras”, explicó a El Comercio Carlos Días Escudero, country manager para Perú y Chile de Cinépolis, la empresa que ha traído esta alternativa de entretenimiento a Lima.
EJERCICIO SINCRONIZADO
La tecnología 4DX
no es nueva. Se usa desde mediados de la década del ochenta en
películas usadas en atracciones en parques de diversiones,
principalmente en Estados Unidos. La diferencia principal es que, en
lugar de disfrutarla en paseos de entre tres a cinco minutos, ahora hay
la posibilidad de extender la diversión durante una hora y media (en
promedio).
La clave de esta tecnología es la sincronización. La infraestructura
de la sala debe estar finamente sincronizada con los momentos en los
que el espectador “deba” sentir algo.
Así, podrás sentir frío en la sala y el olor al pasto recién cortado
si la acción se desarrolla en un campo abierto de madrugada; o podrás
sentir el viento en tu rostro, si el protagonista de la película está en
medio de una persecución. Y prepárate si se trata de una escena de
acción: el asiento se moverá de lado a lado, según la dirección de los
golpes; y si el protagonista cae de lo alto, sentirás unos golpes en la
espalda. Eso sí, no te sorprendas si en un primer plano le cortan la
cabeza a la bruja mala y sientes cómo el chorro de sangre te salpica
directo en la cara.
Pero toda esta diversión tiene un costo alto, en comparación con un ticket regular: cada entrada vale S/.37,50. Sin embargo, puede considerarse una alternativa para pasar un momento muy diferente.
Fuente: El Comercio
No hay comentarios:
Publicar un comentario